Jeison Murillo se llevó una doble alegría este jueves. La clasificación para la final del Valencia, su equipo hasta el pasado mercado de invierno, cuando recaló cedido en el Barcelona, le otorgó automáticamente el primer título de su carrera. Independientemente del vencedor del partido que se disputará el 25 de mayo en el Benito Villamarín, el central cafetero ya es campeón de la Copa del Rey, puesto que ha jugado con los dos finalistas de esta edición.
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