Son pocas, pero cada vez más. Y están derribando otra barrera. Las árbitras de fútbol y baloncesto son otro símbolo del imparable crecimiento del deporte femenino español. Hoy son poco más que una excepción en un mundo de hombres en el que su presencia hace saltar algún comportamiento cavernario, pero esos aullidos machistas se van apagando ante el reconocimiento de un doble mérito: a la dificultad del arbitraje se une el abrirse paso en un universo masculino.
source Portada de Deportes | EL PAÍS http://bit.ly/2TeCPBX
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire