La NBA le puede cambiar la vida a un jugador de un día para otro, en este caso, para bien. 11 años después de que Pau Gasol lo supiera por experiencia propia, cuando los Grizzlies le traspasaron a los Lakers el 1 de febrero de 2008, su fichaje por Milwaukee se ha hecho ya oficial y le catapulta de nuevo. Contrariado por su situación en los Spurs, donde había pasado a desempeñar un papel tan marginal que no abandonó el banquillo en cinco de los siete últimos encuentros, recupera las mejores perspectivas. Podrá luchar de nuevo por contar con minutos de juego, posiblemente como primer relevo del pívot titular, Brook Lopez, y se integra en un equipo con las máximas aspiraciones, líder en la Conferencia Este. Su clasificación es acorde con el potencial de su quinteto inicial, formado por Eric Bledsoe, Malcolm Brogdon, Khris Middleton, Brook Lopez y, su gran estrella, el griego Giannis Antetokounmpo. El entrenador de los Bucks es Mike Budenholzer. Y su banquillo, con Pat Connaughton, Tony Snell, Ersan Ilyasova y George Hill, se reforzó en febrero con la llegada de Nikola Mirotic. Pau Gasol ya jugó con Mirotic en los Bulls y en la selección española.
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