El presidente del Sevilla, José Castro, ha dicho basta. El máximo dirigente del club andaluz ha analizado la propuesta de cierre parcial del Sánchez Pizjuán del Comité de Competición y ha pedido a su afición el cese inmediato de los insultos que se vienen produciendo de forma periódica en el estadio sevillista en los últimos dos años y medio. Estos insultos han provocado que el Sevilla acumule 28 expedientes desde 2014, 300.000 euros en sanciones y la citada propuesta de cierre parcial del estadio. “Hay que poner pie en pared. Hay clubes que insultan, bien porque se trata del Madrid o del Barcelona. Aquí tenemos más eternos rivales que en ningún sitio: el Madrid, el Barcelona, el Betis, el Málaga.... Para animar no hay que insultar, las reglas han cambiado”, reconoció el presidente del Sevilla, quien se comprometió a acabar con los insultos. “Pondremos en marcha un protocolo de medidas para pone6r fin a esos cánticos ofensivos. No se debe producir ningún cántico en los diez partidos que nos restan en casa”, afirmó Castro. El Sevilla tiene previsto iniciar una serie de conversaciones con los radicales del Sevilla, los Biris, para que estos pongan fin a los insultos, así como con otros colectivos y peñas, puesto que, a veces, los insultos nacen del Gol Norte, pero se extienden a otras partes del estadio.
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