“Jugará hasta los 40 años”. Suele comentarlo Pablo Blanco, coordinador de la cantera del Sevilla y descubridor de Jesús Navas, al que captó para el club cuando el extremo, siendo infantil, jugaba en el equipo cadete de Los Palacios. Campeón del mundo en 2010 y de la Eurocopa en 2012 con la selección española, Navas fue la gran sensación del estreno oficial del Sevilla en la primera previa de la Liga Europa que debe jugar el conjunto andaluz. Fue ante el Ujpest húngaro. El Sevilla ganó cuatro cero. Navas marcó el primer gol, dio el tercero y fue una pesadilla para la defensa magiar. Cerca de cumplir los 33 años, Navas jugó el primer partido oficial del curso sin haber disputado ni un minuto de los amistosos jugados por el Sevilla hasta este momento. Tocado por una complicada lesión muscular, Navas ha estado entrenando en solitario la mayoría de la pretemporada. No se encuentran muchas explicaciones en el club a cómo un futbolista que ha entrenado en solitario por precaución y no ha disputado ni un minuto con sus compañeros es capaz de rendir a un nivel tan alto como lo hizo Navas.
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