El dato más relevante de este primer tiempo jugado por España ante Croacia ha sido, sin duda, el fantástico remate de tacón de Kalinic, que ha supuesto el empate de los croatas al filo del descenso. Se trata de un gol con mucha literatura detrás. Para empezar, rompe una impresionante racha de siete partidos de España imbatida en fases finales de la Eurocopa. Desde que la selección española empatara con Itañia (1-1) en el duelo inicial de la pasada Eurocopa de 2012, España no había recibido ni un gol en los encuentros jugados ante Irlanda, Croacia, Francia, Portugal, Italia, República Checa y Turquía. Han sido 733 los minutos en los que España no ha recibido un gol. El tanto de Kalinic mancha una trayectoria espectacular de la selección en esta faceta, pues no recibía un gol en partido oficial desde su duelo ante Eslovaquia (nueve de noviembre de 2014).
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