Cinco alemanes, todos rubios, dos con gorra, 180 centímetros de estatura media, entran en uno de los vagones del metro de Madrid en la parada de Ópera. No hay espacio para ninguno de ellos, pero empujan y empujan y se hacen hueco. Los cinco ríen. A su alrededor el silencio y las primeras coplas: “Joder con estos alemanes”. Ninguno habla castellano porque siguen con la guasa al menos tres paradas más. Después una ola de calor inunda sus frentes y paran. Tratan de respirar y refrigerar el cuerpo. Ninguno de ellos lleva la camiseta del Bayern, pero eso cambia al bajarse del tren. Delante espera Götze, de gris, con un grupo de bávaros. Uno de ellos con un peto de pana marrón claro, tirantes, gorro y las medias rojiblancas del Bayern subidas hasta las rodillas. Ahí ya se sienten como en casa y comienzan a gritar.
source Portada de Deportes | EL PAÍS http://ift.tt/1SBqlgu
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire