Durante algunos minutos de la tarde del 31 de enero, el último día para cerrar los fichajes de invierno, la transferencia estuvo caída. Roman Zozulya tenía todo listo para pasar del Betis al Rayo Vallecano, pero la afición del equipo de Madrid rechazó rotundamente la llegada del jugador ucraniano. Lo acusaron de "neonazi" y de "fascista" en un comunicado difundido en redes sociales. La dirigencia dudó, pero concretó el traspaso, y aseguró que todo se ha tratado de un malentendido. Esta mañana, algunos aficionados rayistas del grupo Bukaneros se han presentado en el entrenamiento con una pancarta. "Vallekas no es lugar para ti. Presa, para ti tampoco. Vete ya", decía el cartel, en alusión al jugador y a Martín Presa, presidente del club.
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