Paco Jémez tiene bien controlado el tiempo. Desde que llegó a México, a inicios de diciembre, su agenda está llena de solicitudes de entrevistas. Es el hombre del momento para Cruz Azul, un equipo que ha perdido la brújula para encontrar el sendero de éxitos que vivió en los años setenta. El español llega tras una desafortunada experiencia en el banquillo del Granada. Fue una de las apuestas del máximo accionista, el chino Jiang Lizhang. Su meta era situar al club entre los primeros 10 de la liga, pero fue despedido tras sumar cuatro derrotas y dos empates. “Con el dueño tuve muy poca relación, no venía, él estaba en China. Tuve una relación comprometida con la gente que estaba ahí en el club. No era lo que a mí se me prometió”, comenta.
source Portada de Deportes | EL PAÍS http://ift.tt/2iM8vk7
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire