En la cabeza de Zidane el efecto Zidane no ha terminado ni siquiera después del empate contra el Betis que le costó dos puntos al Real Madrid. El técnico francés sigue igual de sonriente, tranquilo y optimista que siempre. “Todos los partidos son diferentes, lo único que yo hablo con mis jugadores es que hay que respetar al rival y para eso hay que salir metido y fuerte desde el principio”, contestó cuando le preguntaron qué había pasado en el Benito Villamarín. ¿En Sevilla no pasó eso?, le insistieron. “No, no pasó y puede pasar… y nos ha costado dos puntos”, comentó el técnico francés.
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