Lo que ya se apuntaba en los ocho días de entrenamientos de pretemporada en Barcelona se acabó confirmando en los libres del viernes del primer gran premio del año, en el circuito de Albert Park de Melbourne (Australia). Mercedes sigue mandando y domina con claridad a todos sus rivales, pero Ferrari parece bastante más cerca que al final del año pasado y se vislumbra incluso la posibilidad de que pueda plantar cara a las flechas de plata a lo largo de esta campaña. Lewis Hamilton fue el mejor en las dos sesiones del viernes y concluyó con un tiempo de 1m 23,6s, que supera en dos décimas la pole position que él mismo obtuvo en este trazado en 2016. Las nuevas normas han permitido que los coches sean mucho más rápidos y los tiempos bajarán todavía más en la clasificación.
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