Pasada la media hora, Messi recibió en la frontal y engatilló de primeras con el interior del pie izquierdo. El balón, aunque potente, iba bien centrado y no parecía ningún compromiso para Neto. Pero el cancerbero se enredó de lo lindo, toda vez que la pelota se le escurrió de las manos y pasó por debajo de sus piernas para entrar en la portería. El guardameta, sin embargo, trató de disimular o corregir el error y se tiró con el acierto de sacar la pelota fuera de la portería. Messi levantó los brazos como el resto de los azulgrana. Pero el colegiado no validó el gol.
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