Persuadidos del meteórico crecimiento del valor del fútbol televisado, en 2013 los dirigentes de la UEFA emprendieron un proceso de revisión del negocio. Después de consultar a los seleccionadores nacionales en diversos congresos, el organismo que regula el fútbol europeo informó de que el consenso general apuntaba a reemplazar el calendario de 10 partidos amistosos bianuales por un nuevo modelo. Se apuntó a la necesidad de elevar el valor competitivo de los partidos. La explotación comercial fue el motivo primordial. La respuesta es la Liga de las Naciones, que arranca el próximo jueves en Múnich con un cartel propio de final mundialista: Alemania-Francia.
source Portada de Deportes | EL PAÍS https://ift.tt/2NGudBG
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire