El Real Madrid comenzó su carrera por el título de Liga venciendo al Iberostar Tenerife (83-73) en el primer partido de la eliminatoria de cuartos. Sin excesiva brillantez pero con mucha solvencia, el campeón de Europa de baloncesto prolongó el estado de optimismo del club con un triunfo basado en los puntos de Carroll (15), el trabajo de Felipe (18 de valoración), los rebotes de Randolph (11) y la intendencia de Doncic. En equipo superaron los blancos la meritoria oposición tinerfeña liderada por la pareja Tobey-Abromaitis. El martes, segundo asalto en la isla con el primer match ball para los blancos. El “¡campeones, campeones!” y el “¡reyes de Europa, somos los reyes de Europa!” fueron la banda sonora de la mañana en un WiZink Center radiante de felicidad.
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