Hay un futbolista del Barça que no gana premios, ni siquiera está nominado para la mayoría de galardones, y si alguna vez forma parte de una terna de aspirantes al trofeo más recóndito, incluso hecho a la carta, normalmente acaba perdiendo la votación, tanto da que el organizador sea la FIFA, la UEFA o la Liga. No se trata de Busquets sino de Luis Suárez. Incluso cuando en la temporada 2013-2014 acreditó su condición de máximo goleador europeo tuvo que compartir la Bota de Oro con Cristiano Ronaldo. No queda bien recompensar a un delantero que ha sido denunciado por insultos racistas, es muy capaz de morder al defensa más fiero, no se plantea más alternativa cuando pisa el área que el gol o el penalti, entregado a la causa de que el fin justifica los medios, también en el Barça.
source Portada de Deportes | EL PAÍS http://ift.tt/1lW277t
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire