El Baskonia, llegado al precipicio tras la primera derrota ante el Valencia, decidió saltarlo. Le ayudó, y de que manera la pértiga de Ricky Ledo, contratado a última hora para suplir la lesión de Budinger, y por fin hizo honor a su fama de asaltacanastas, cosechada en Turquía donde promediaba 21 puntos por partido. Ante el Valencia, cosechó 24 (17 en la primera mitad), utilizando todas las facturas: triples, media distancia, tiros libres y rebotes, exhibiendo un poderío físico y unas piernas demasiado fuertes para el cansado músculo del rival.
source Portada de Deportes | EL PAÍS http://ift.tt/2rvQMB4
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire